Entradas

¿De qué lado estás?

Imagen
Jos 24:15  Y si mal os parece servir a Jehová,  escogeos hoy a quién sirváis;  si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres,  cuando estuvieron al otro lado del río,  o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis;  pero yo y mi casa serviremos a Jehová. Protestas, marchas, inconformismo social, violencia contra la autoridad, abuso policial, bloqueos, muertes de lado y lado, todo esto ha sido la realidad con la que hemos despertado los Colombianos las últimas semanas. En medio de semejante polarización todos quieren tomar partido, unos son afines a un bando y lo defienden a muerte, los otros están en el bando contrario y también se hacen matar por él, y en medio de esta violenta guerra, se hace patente la pregunta: Y tú ¿De qué lado estás? La sola pregunta es interesante ya que deja ver la manera arbitraria en que piensa gran parte de nuestra sociedad, quienes, acostumbrados a armar bandos opuestos, te incluyen en uno de ellos a veces sin que te des cuenta, de tal manera

¿Por qué teméis?

Imagen
Mt. 8:26  El les dijo: ¿Por qué teméis, hombres de poca fe? Entonces, levantándose, reprendió a los vientos y al mar; y se hizo grande bonanza.   En los últimos meses ha circulado por los diferentes medios de comunicación, resultados de algunas encuestas y mediciones con respecto a la salud mental y emocional de los colombianos en medio de la pandemia. La experiencia de padecer esta enfermedad, el temor por el contagio, la perdida de seres queridos, amigos o compañeros, el desempleo, la situación económica del país, el aislamiento y los cambios que ha traído esta contingencia, han llenado de preocupación, ansiedad e incertidumbre el corazón de muchos colombianos y esto ha traído como efecto el aumento de estrés, insomnio, sobrepeso por ansiedad, irritabilidad, depresión, etc.   La situación ha afectado a todo tipo de personas sin distinción, e incluso a muchos creyentes, iglesias y pastores, que en medio de la tormenta han sentido zozobrar la barca. Esta situación nos recuerda el pasaj

La caja de Pandora

Imagen
  Pro 22:3  El prudente ve el peligro y lo evita; el imprudente sigue adelante  y sufre el daño. «Abrir una caja de Pandora», una expresión que seguramente hemos oído y que tiene un significado interesante. Proviene de un mito griego en el que una mujer llamada Pandora, recibe como regalo de bodas una caja con instrucciones de no abrirla bajo ninguna circunstancia. Pandora no soporta la curiosidad y termina abriéndola, liberando así lo que había en su interior, todos los males del mundo. La expresión se usa como una analogía para hablar de una acción en apariencia pequeña e inofensiva, pero que puede traer consecuencias catastróficas. Veo con tristeza en este tiempo, una realidad que me recuerda esta analogía. Una caja de pandora que parece atractiva e inofensiva, pero que termina desatando una multitud de males. Esa triste realidad que está corroyendo las nuevas generaciones es la drogadicción. La droga se ofrece en el mundo entero como un regalo atractivo, y aunque todos saben que no

Los Espirituales

Imagen
Gal 6:1  Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta, vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu de mansedumbre, considerándote a ti mismo, no sea que tú también seas tentado.   En la lingüística hay un fenómeno llamado cambio semántico, aunque su nombre nos suene extraño, el termino se refiere sencillamente al cambio de significado que las palabras experimentan a través del tiempo. Por causa de este fenómeno, una palabra puede terminar desvinculándose completamente de su significado original, es decir, una expresión que hoy significa una cosa, mañana puede significar otra casa totalmente distinta. Una de las razones para este cambio es el frecuente uso equivocado que se hace de las palabras. Esta es una realidad que hace parte de la transformación de los diferentes lenguajes. En el ámbito de la iglesia cristiana pasa con mucha frecuencia, usamos palabras que están escritas en la Biblia, dándole el sentido que mejor nos parezca y terminamos cambiando totalmente

¿Echarse la soga al cuello?

Imagen
Heb 13:4  Honroso sea en todos el matrimonio,  y el lecho sin mancilla;  pero a los fornicarios y a los adúlteros los juzgará Dios. El matrimonio es una de las instituciones de las que, con más frecuencia, se oye hablar mal hoy en día. En libros, artículos, películas, y entre la gente se oye decir frases como: casarse es echarse la soga al cuello… El escritor y dramaturgo español Enrique Jardiel Poncela escribió al respecto: Patrimonio es un conjunto de bienes; matrimonio es un conjunto de males. ¿Cuál es la razón de tanta indignación contra una institución que ha sido de tanta bendición en la historia de la humanidad? Cuando le preguntas a las personas que tienen este concepto negativo, casi todas hablan de tres razones principales, lo interesante es que estas tres razones tienen algo en común. La primera razón es lo que muchos denominan “una mala experiencia“ Casi todos han tenido una mala experiencia con el matrimonio o conocen a alguien cercano que la tuvo. Para nadie es un secreto

Juventud, una gran oportunidad

Imagen
Ec. 12:1  Acuérdate de tu Creador en los días de tu juventud,  antes que vengan los días malos,  y lleguen los años de los cuales digas:  No tengo en ellos contentamiento; ​ La juventud es para muchos, uno de los periodos más agradables de su vida, es la etapa entre la infancia y la madurez. Ya no eres un niño por eso tienes un mayor grado de independencia y algunos privilegios, pero tampoco eres una persona madura y eso te permite vivir sin muchos compromisos.  No pagas por el techo bajo el cual vives, no tienes responsabilidades con los bancos, no llegan los pagos a tu nombre, todo lo contrario, antes, en muchos casos, los jóvenes reciben un beneficio mensual o semanal por parte de sus padres, una mesada para sus gastos de estudio. ​ Si a esto le sumas que la juventud es generalmente la época en que mejor salud tienes, en que físicamente te ves muy bien y tienes más energías para hacer cualquier cosa, entonces podríamos decir que la juventud es “una gran oportunidad” Yo sé que este n